Hola...si llegué bien, ahora estoy tomando un café en una estación de servicio a ver si me saco el frío y en un ratito me voy al mayorista así termino temprano y pego la vuelta antes del mediodía, la verdad Bahía está tan gris!-Como de duelo- que no dan ganas de quedarse ni un minuto. Bueno te llamo cuando salga para allá así no te preocupás, un beso, chau.
El café de las maquinas estas es una porquería pero si no tomaba algo caliente iba a quedar duro como ese árbol de enfrente. Mirá ese tipo como duerme recostado en la mesa, tiene toda la noche del viernes encima, ahí hay una foto...que bueno que traje la máquina.La cajera va a pensar que soy servicio o un degenerado sacándole fotos a un tipo durmiendo, huy! Me parece que se despertó. Alguna vez alguien me dijo si no podés sacar la foto que querés date vuelta y sacale a lo primero que se te cruce, mejor apunto para afuera y gatillo. lo único que me falta es que me caguen a palos por esta vocación de corresponsal de guerra amateur que tengo.Click! Ya está, zafé.
<- Por favor Enrique andá vos y sacá sus cosas, para mí es muy difícil, era mi hermana, no podría enfrentarme a todos los recuerdos que hay en cada objeto de esa casa.¡Qué fácil que la hizo! Que vos sos hombre, sos mas fuerte, si ya sé que la querías mucho pero vos vas a poder yo la verdad no tengo fuerzas...y acá estoy, camino a lo de mi cuñada a vaciar el departamento para que la inmobiliaria lo pueda mostrar, haciendo el camino que hice tantas veces durante los últimos veinte años, pero esta vez como un viaje final que me enfrente a la despedida que evité durante su internación, como si para mí fuera mas fácil, como si no hubiera un recuerdo y una culpa en cada platito colgado en la pared, cada regalo de nuestro aniversario clandestino que Marta atesoraba como si un pedazo de mí se albergara en él. Y acá voy como un carcelero que va a ponerle llave a una celda para que nadie se entere de quien la habita, para que guarde el más sucio de los secretos para siempre, las llaves me pesan como si fueran un grillete que me ata a esa celda de mentiras que habitaré por el resto de mis días.
Nota: La foto es de Ezequiel, la historia podría ser mía, de él o tal vez de Enrique, no sé>
El café de las maquinas estas es una porquería pero si no tomaba algo caliente iba a quedar duro como ese árbol de enfrente. Mirá ese tipo como duerme recostado en la mesa, tiene toda la noche del viernes encima, ahí hay una foto...que bueno que traje la máquina.La cajera va a pensar que soy servicio o un degenerado sacándole fotos a un tipo durmiendo, huy! Me parece que se despertó. Alguna vez alguien me dijo si no podés sacar la foto que querés date vuelta y sacale a lo primero que se te cruce, mejor apunto para afuera y gatillo. lo único que me falta es que me caguen a palos por esta vocación de corresponsal de guerra amateur que tengo.Click! Ya está, zafé.
<- Por favor Enrique andá vos y sacá sus cosas, para mí es muy difícil, era mi hermana, no podría enfrentarme a todos los recuerdos que hay en cada objeto de esa casa.¡Qué fácil que la hizo! Que vos sos hombre, sos mas fuerte, si ya sé que la querías mucho pero vos vas a poder yo la verdad no tengo fuerzas...y acá estoy, camino a lo de mi cuñada a vaciar el departamento para que la inmobiliaria lo pueda mostrar, haciendo el camino que hice tantas veces durante los últimos veinte años, pero esta vez como un viaje final que me enfrente a la despedida que evité durante su internación, como si para mí fuera mas fácil, como si no hubiera un recuerdo y una culpa en cada platito colgado en la pared, cada regalo de nuestro aniversario clandestino que Marta atesoraba como si un pedazo de mí se albergara en él. Y acá voy como un carcelero que va a ponerle llave a una celda para que nadie se entere de quien la habita, para que guarde el más sucio de los secretos para siempre, las llaves me pesan como si fueran un grillete que me ata a esa celda de mentiras que habitaré por el resto de mis días.Nota: La foto es de Ezequiel, la historia podría ser mía, de él o tal vez de Enrique, no sé>
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